Debi Hubbs nunca podía imaginar lo que cambiaría su vida cuando abrió una caja de acuarelas para pintar con sus tres hijos pequeños. Este nuevo mundo creador en familia se convirtió en imprescindible para ella. Veinte años más tarde es una gran ilustradora con un uso divertido del color que hace sus dibujos especialmente llamativos.
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La primera imagen es divertidísima (si, ya se que tengo pocos registros, o todo me encanta, o todo es -ísimo, jajaja). Más besos
ResponderEliminarQue, decir, que, agradezco a Dios, por haber encontrado a esta eximia pintora, que me ha hecho recordar mi infancia en una finca en Mendoza Argentina.
ResponderEliminares un blog espectacular!! estaría todo el día disfrutándolo
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